Diferencias entre la comida orgánica y la no orgánica
La primer y más clara diferencia es el precio. Claramente la comida orgánica es más cara que la comida regular que se viene comiendo hace años. Sin embargo, la comida normal que comían nuestros abuelos no era la misma comida normal que comemos la mayoría de las personas hoy.
En los últimos años la tecnología avanzó mucho. Esto afectó a las industrias muchísimo. Además recordemos que la población creció. Hoy se produce mucho más comida que antes, por lo tanto las industrias deben producir mucho más. Cuando antes se conseguían vegetales, carnes, huevos y demás de productores locales y pequeños que todo lo producían de forma natural, hoy la mayor parte de los productos alimenticios son producidos por las grandes industrias.
Éstas industrias para abaratar costos y mejorar sus productos hacen cambios a nivel genético, por ende esas grandes y rojas manzanas sin ninguna imperfección. Deben combatir las plagas, los cambios climáticos y otros imprevistos para no perder dinero. Es por eso que en algunos productos, los alimentos de ‘marca’ son más baratos que los productos ‘orgánicos’ o ‘naturales’ de emprendedores o mercados pequeños. Éstos tienen costos mayores y muchas veces mayores riesgos.
Más diferencias entre la comida orgánica y la que no lo es
La comida orgánica contiene más antioxidantes, más bajos niveles de metales tóxicos como así también de pesticidas.
Hay varios estudios realizados (Universidad de Arizona y Universidad de Newcastle) que han encontrado clara evidencia de mayor número de antioxidantes en menores cantidades de alimentos orgánicos comparado a los regulares. Es decir que comiendo menores cantidades de alimentos orgánicos se ingieren mayores cantidades de antioxidantes que en la comida regular. Esto explica porqué vale la pena pagar más por la comida orgánica ya que ciertamente, en términos de salud, se recibe más.
¿Qué significa ‘comida orgánica’?
El término ‘orgánico’ se refiere a la forma en que se cultivan y procesan lo productos agrícolas. Cada país tiene sus propias regulaciones respecto al uso de pesticidas sintéticos, genes de bio-ingeniería (GMOs), fertilizantes derivados del petróleo o a base de lodos de depuradora.
Además, el ganado orgánico para carnes, huevos y productos lácteos debe tener acceso al exterior y alimentarse también con alimentos orgánicos. Orgánicos no es nada más ni nada menos que la tradicional forma de alimentarse, con pastos por ejemplo pero que no hayan sido manipulados genéticamente, etc. La forma en que se presenta parece que se trata a los animales como reyes, pero no. Simplemente se intenta que los animales vivan de forma natural, en su hábitat, como siempre lo hicieron y de esta forma el animal y sus derivados serán igualmente sanos, es decir orgánicos.
Muchas veces se les dan antibióticos, hormonas y otros derivados animales para lograr que crezcan más grandes y rindan más a la hora de vender sus productos. Además, recordemos que muchos de éstos animales viven en condiciones deplorables, y por tanto el riesgo de enfermedades aumenta, de ahí que necesiten antibióticos. En otras palabras, la demanda de alimentos en cantidad y en bajo precio, más la codicia de las grandes industrias, se desencadenó en una generación que viene alimentándose con comidas poco naturales y más bien fabricadas casi artificialmente.
Los productos orgánicos también se pueden cultivar con fertilizantes y pesticidas naturales como el famoso ‘compost’. Los yuyos se controlan naturalmente con rotación de cultivos etc.
El ganado no recibe alimentos manipulados genéticamente ni hormonas. Las enfermedades se previenen por medio de la limpieza, rotación y una dieta sana, además de acceso al aire libre. En el caso del ganado convencional, sucede todo lo contrario.
El beneficio de la comida orgánica
Recordemos que muchos de los alimentos convencionales contienen químicos para preservarlo más tiempo. Claramente aumenta la vida útil del producto y favorece las ganancias. Por lo tanto, las comidas orgánicas son más frescas justamente por no tener todos esto preservasteis.
Cómo los animales no sufren tanto por estar encerrados, los productos orgánicos contienen menos hormonas naturales segregadas por el animal. Cuando un animal sufre y está bajo estrés, segrega hormonas al igual que lo hace una persona. Por lo tanto no es lo mismo que comer una carne orgánica que una carne convencional.
Para los que están preocupados y comprometidos con el medio ambiente, la comida orgánica también favorece en esta perspectiva ya que no requiere tantos contaminantes como son los fertilizantes. Al contrario, conserva el agua, reduce la erosion del suelo y aumenta su fertilidad, por último, utiliza menos energía.
La carne y la leche orgánica contiene más nutrientes como por ejemplo, el Omega-3.
¿Significa que tengo que comprar toda la comida orgánica?
No… no es necesario comprar toda la comida orgánica. Aquí hay una lista que puede ayudarte a saber qué es lo que vale la pena comprar orgánico y qué cosas no hacen falta.
Frutas y Vegetales que es mejor que compres orgánicos
Manzanas, marrones, pepinos, apio, papas, uvas, tomates, kale, zapallo, mandarinas, duraznos, espinaca y frutilla
Frutas y Vegetales que no hace falta que compres orgánicos
espárragos, avocados, hongos, repollo, choclo o maíz, berenjenas, kiwi, mango, cebolla, papaya, ananá, arvejas y batata
Lo mejor es comprar siempre las frutas y verduras de estación.
Por último: Comida orgánica y comida sana
Comer orgánico no significa comer sano necesariamente. Puedes hacer un postre con azúcar, sal y grasa orgánica, y sigue siendo una comida alta en azúcar, grasa y sodio, lo cual no es bueno para la salud. Muchos negocios venden este tipo de productos haciendo pasar por sano simplemente porque es orgánico y pero orgánico se refiere a lo sano respecto a las comidas convencionales. Luego viene otro aspecto de salud relacionado con las comidas que se producen con los ingredientes alimenticios.
Muchas veces se cree que la comida orgánica es comida para celíacos. Aveces se cree que si se come orgánico se adelgaza, o si se come comida para celíacos también se baja de peso. También está la moda de ser vegano. Muchos se hacen veganos por una filosofía, otros porque piensan que es más sano, otros por moda, y otros simplemente creen que van a ‘adelgazar’.
Pues bien, la comida sin gluten significa que no se pueden ingerir productos con gluten que es una proteína llamada ‘gluten’. Ésta proteína se encuentra en los productos naturales: Trigo, Avena, Centeno y Cebada y por eso se llaman products SIN TACC. Pero hay otros productos manufacturados que contienen esta proteína igualmente, como muchos alimentos con conservantes. En otros casos, hay alimentos que son procesados en las mismas plantas industriales que productos que contienen gluten, incluso en las mismas máquinas, y entonces los alimentos que en principio no tendrían gluten, pueden tenerlo. Ésto pasa muchas veces con el arroz. El arroz por si mismo no tiene gluten y es el ingrediente principal de las comidas con hidratos de carbono para celíacos, sin embargo, muchas industrias utilizan los mismos molinos de arroz para otros cereales que sí contienen gluten y por eso es que si compras arroz para celíacos debes cerciorarte que tenga la etiqueta.
